El 23 de Mayo, deberiamos haber disfrutado de una visita a "LA NUBE"; pero lamentablemente, Pablo Medina (h) fue victima de la violencia cotidiana...
Resistir para contarlo
Andar por las nubes puede ser una defensa frente a ciertas inclemencias, por ejemplo, la violencia urbana. A veces -suelo decirme- la realidad es demasiado real y me escondo en esos espacios donde la creación, el pensamiento, la imaginación, me ponen en contacto con lo mejor del ser humano.
Descubrir con la mirada de un niño que descubre libros, juegos, música, es reeditar la experiencia que ya hice, cuando ese niño era sólo una promesa en la niña que ahora es su madre. Esa NUBE ya existía, en el cielo de mi ciudad, cuando mi hija era pequeña; y ahora, dispuesta a visitarla con Benito, su hijo, no pudo ser. Una tristeza grande, muy grande, nos toca cuando uno ve alcanzado el refugio de los hacedores, los escritores, los que ponen al alcance de la infancia palabras para filtrar la violencia, para ser puente entre el pasado y el futuro, para que los chicos puedan construir más adelante. Un tiro en la cabeza que piensa para abrir puertas a los chicos es un dolor de difícil resolución. Hay gente que, con los efectos de sus planes y sus acciones, desgarró el tejido social; seguramente, andan en autos blindados y construyen sus fortalezas con el dinero que les pagaron, por hacer lo que hicieron, los dueños del proyecto global de empobrecimiento. Pablo volvía caminando del banco; no tenía nada blindado para protegerse. Seguramente, pensaba en el hermoso espacio para la cultura que su padre Pablo Medina, junto con otros, había creado y dirigía. Es probable que no le sobraran los recursos a esta asociación La Nube (que recibió la mención de la Legislatura porteña como artífice del Patrimonio cultural de la Ciudad de Buenos Aires) y trató de defenderlos del robo.Nuestra solidaridad, respeto, cariño, a quienes tanto han hecho por la lectura, los cuentos, la infancia y la cultura. Cuando sea el momento adecuado iremos a esa Nube a aprender, a jugar, y a darles las gracias por embellecer el cielo de nuestra ciudad.
Cristina Villanueva pluma@velocom.com.ar
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